El Atentado
(Yasmina Khadra)
Yasmina Khadra es el seudónimo femenino de Mohammed Moulessehoul, un excomandante del ejercito argelino, que adoptó este sobrenombre para poder escribir desde dentro contra las injusticias cometidas en su país por los círculos de poder político y militar. Khadra reveló su secreto en "El escritor", una de sus mejores novelas. Actualmente reside en Francia y es un autor universalmente alabado. "El atentado" es uno de sus libros más perturbadores y en él aborda algunos de sus temas habituales: la violencia, el integrismo, la soledad, el desarraigo... pero incorpora un punto de vista insólito, el de un médico judío bien situado, de origen árabe, residente en Tel-Aviv, cuya mujer, a la que amaba y creía conocer bien, se autoinmola en un atentado terrorista. Tras la brutalidad del comienzo lo sitúa en el Hospital donde trata de ayudar a los numerosos heridos y donde descubre que la integrista que se autoinmoló era su esposa. Al principio se resiste a creerlo, cree que ha sido un error, luego que fue manipulada y finalmente recibe una carta de ella, fechada el día anterior a la explosión, en la que se despide y revela sus intenciones. Ante el doctor -hasta entonces bien situado y considerado, de espalda a los conflictos que sufre su pueblo de origen en la zona - se abre un doble abismo: el de la culpabilidad y el replanteamiento de un pasado en el que creía saberlo todo sobre su mujer y el de un entorno social, el israelí, que comienza a rechazarlo, tanto a nivel personal como profesional. Tanto los suyos como los que ahora resultan ser los camaradas e incitadores de su mujer le dan la espalda, en distinta medida, cuando acude a Belén o a Palestina en busca de respuestas al infierno psicológico en el que lo ha sumido el suceso. Todos lo creen en cierto modo culpable, bien por su origen árabe-se hace manifiesto el racismo en la sociedad israelí- y el desconocimiento de las intenciones de su mujer o por haber vivido refugiado en la jaula de oro de su trabajo como eminente cirujano dando la espalda a la violencia sociopolítica que sacudía a su país. Sólo una mujer Kim, intentará ayudarlo. Khadra, como hace en otro de sus libros, "Las golondrinas de Kabul", donde analiza la opresión de las mujeres bajo regímenes religiosos y patriarcales, sitúa a las mujeres como una voz no siempre, pero sí ocasionalmente, más lúcida, en un mundo donde son casi siempre los varones los que dirigen la sinrazón de los conflictos bélicos y la irracionalidad del odio... Khadra, que nos envuelve en la tensión del relato hasta su impresionante desenlace, vuelve a demostrar cómo con su pluma, acerada y cortante, inteligente; en ocasiones despiadada, pero a la vez enormemente emocional -con ráfagas de ternura- puede narrar con igual solvencia y ritmo historias bien diferentes; si bien sus ejes temáticos siguen siendo los mismos: los conflictos bélicos, el militarismo, el desarraigo existencial, el choque de culturas, la diferente posición de hombres y mujeres en la sociedad, la crisis personal que surge por el contexto sociopolítico, el fundamentalismo occidental y el islámico. Con su implacable estructura circular "El atentado" es un descenso a los infiernos de la sinrazón de la mano de alguien que inútilmente creía que podía mantenerse al margen de los mismos.
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