Incompletamente
(Juan Gelman)
La palabra poética debe ser lenta y profunda. La metáfora debe llevar a otro lugar, desconocido por la palabra. El lugar puede ser el abismo más hondo. La soledad, la más sola de todas; el dolor, la fuente del poema. Los poemas de Incompletamente (1993-1995), del ya consagrado escritor argentino Juan Gelman, no se pueden leer de cualquier manera: ha de seguirse un ritual. Se ha de comenzar por el silencio, necesariamente; se debe abrir el libro con precaución y leerlo página por página, palabra por palabra, como si se estuviera aprendiendo a leer. Entonces, el autor te da la llave para entrar en el infierno. Tú te dejas llevar. Avanzas. Tal vez el lugar te sea familiar. Recuerdas tus muertos. Pero no son los muertos. Repasas el dolor, pero no se trata sólo del dolor. Llegas a la pregunta, cocinera de la razón, y la encuentras aterrada. Algo le pasa a la pregunta que calla. Debe ser la respuesta. ¿y la respuesta? La respuesta se fue hace mucho tiempo. Entonces vuelves al poema. Avanzas por la cadencia. Encuentras un minotauro, que es media palabra unida con otra media. No comprendes nada. Esa es la idea. Tu mente vuela. Otro minotauro y sientes que ya no puedes más. Un abismo muy hondo. Pero puedes. Avanzas. Atraviesas el infierno y regresas. Es medio día. Hay que bañarse y hacer de comer.
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