Resumo de La Rebelión De Las Masas - José Ortega Y Gasset

?La Rebelión de las Masas? es un ensayo capital en la obra del reconocido filósofo español José Ortega y Gasset (1883-1955), en donde realiza una elevada y profunda taxonomía de un tipo de ser humano al que llama ?hombre-masa?. Tipo de hombre que en la época de publicación del libro (1926), estaba invadiendo todos los estratos sociales, y peor, todos los puestos de relevancia tanto públicos como privados. Es el tipo de hombre que domina e impera actualmente sobre occidente, del que Ortega y Gasset ya nos quiso advertir por la primera mitad del siglo XX, intentando desplegar las causas y funestos efectos que tendría la llegada del hombre?masa a todos los ámbitos de la sociedad. El autor estructuró el libro de forma inductiva, ya que la primera parte nos sumerge en la descripción individual del hombre?masa, sus precarias condiciones espirituales y su inmovilidad intelectual. Acercándonos a la pulsación interna que se desarrolla sicológicamente en este tipo de ser. Luego de acabada la descripción singular las páginas se enfocan hacía la generalidad, hacía lo común universal que mueve las pasiones e intereses del espécimen estudiado. Gracias a las claras observaciones de Ortega y Gasset vamos viendo los rasgos distintivos que caracterizan a este tipo de hombre, su absoluto desprecio por la trascendencia, por el conocimiento, por instancias más sublimes. La ambición de reconocimiento social que lo impulsa como motor fuera de borda, su unidimensionalidad, su falta de valores y reconocimiento a ellos, la falta de proyectos individuales de vida, que la masa amorfa y descolorida insiste en destruir; o en el desprecio violento que el hombre?masa siente por los pilares culturales que han fomentado su ascenso al poder y a la ?acción directa?, aquellos elementos fundamentales que lo sostienen como colectividad. Una advertencia, porque un natural prejuicio nos pudiera tratar de confundir haciéndonos creer que lo que Ortega y Gasset propone es una línea de explicación social clasista, en donde se presenta a una masa de obreros ignorantes y una elite cultivada y sabia. Pero no, el autor nos aclara de inmediato que el fenómeno del hombre-masa es un hecho transversal, se encuentra en los estratos sociales altos como en los bajos, tiene que ver con la calidad de ser humano que se es, y no a una condición económica. Y como la experiencia bien nos dicta, siempre los modos de una época vienen regulados desde los sectores acomodados, por lo tanto Ortega teme y supone una absoluta degradación de estos sectores, antes que de los más desposeídos. El libro, escrito de forma clara y ordenada, sorprende en muchos de sus pasajes más cruciales. Claro, porque cuando Ortega y Gasset nos menciona las claves escondidas de las causas que lograron poner al hombre-masa como protagonista de la historia, nos dice que aquellas cosas que más nos enorgullecen como civilización son, paradójicamente, las que provocaron el surgimiento del hombre-masa, la Revolución Industrial y la Democracia Liberal moderna. Se sostiene la tesis que mediante la ciencia experimental ? que desde Galileo subió como la espuma -, sumado al capitalismo de primer origen, crearon el caldo de cultivo perfecto para que las Masas pudieran crecer y crecer hasta convertirse en una pasta humana que lo satura todo con su ?lleno? en cada espacio de la ciudad y sus transportes, y que de paso impone sus modos que nos son otra cosa que vacíos éticos y culturales. Así, la potente visión intelectual del autor logra penetrar en las oscuras prisiones donde se mantiene cautiva a la verdad, y descubre otra de las sorpresas que aguarda al lector, y no es otra que cuando Ortega y Gasset trata de identificar al hombre-masa en su más evidente prototipo, señala segura y enérgicamente al hombre de ciencia y sus dependientes, es decir los técnicos. Asegura que la necesidad de la ciencia por seguir avanzando a creado la paranoia de la ?especialización?, que genera sujetos encerrados en su pequeña parcela de conocimientoefectivo, pero que desconoce la virtud de la totalidad del saber y su sublime poder creativo. Científicos que han perdido la visión de altura y una perspectiva sobre el devenir. De esa forma la decantación de esta atrofia espiritual cae en los profesionales técnicos que dependen de los resultados del científico, tales como médicos, ingenieros, economistas, etc. encerrados en los muros mentales de su pequeño recinto de eficiencia. Así generación tras generación cada hombre se adapta a los patrones prefijados por aquellos que en teoría deberían estar encima de la escala social, sin embargo, cuando científicos y técnicos son parte integrante de una multitud indiferenciada y homogénea lo que prevalece es la falta de intereses integrales en el desarrollo del hombre. La lectura de ?La Rebelión de las Masas? constituye toda una aventura intelectual, que nos proporciona un panorama claro y asertivo de lo que es ya una realidad patética, y que eran los peores temores de Ortega y Gasset, que el pandemonium de la masa informe y sus individuos, sin individualidad, sometan a todos los estratos sociales y culturales a sus antojos viscerales de ciega, baja y estéril ambición

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