La Casa De Las Bellas Durmientes
(Yasunari Kawabata)
Original y brillante novela corta del premio nobel Yasunari Kawabata, cuyo argumento parece haber influido en la última obra de García Márquez.
Durante cinco noches, descrita cada uno en uno de los cinco capítulos de la novela, el anciano Eguchi acude a dormir a la que llaman la Casa de las Bellas Durmientes, una especie de prostíbulo donde hombres que ya no pueden tratar a las mujeres como tales, es decir, ancianos, se confortan durmiendo con bellas jovencitas completamente desnudas y además fuertemente narcotizadas, de manera que no pueden hacerles sentir la vergüenza de su decrepitud. Los clientes tienen prohibido intentar despertar a las muchachas o hacer otra cosa que acariciarlas, besarlas y dormir abrazados a ellas después de tomar a su vez otros somníferos más débiles que les dejan junto a las camas.
Eguchi, que dice tener sesenta y siete años y ser uno de los menos viejos clientes de la casa, expresa en cada una de esas noches los sentimientos que les despiertan las jóvenes durante sus sueños, sus cuerpos a su merced, así como los recuerdos que le traen de otras mujeres o de su madre, su esposa y sus propias hijas.
A Eguchi le vienen ideas de intentar penetrar e incluso de estrangular a las indefensas muchachas, aunque siempre acaba respetando escrupulosamente las reglas. Pide a la mujer que cuida el lugar que le dé un narcótico como el de las chicas, pero ella se niega porque dice que para los ancianos es peligroso.
Eguchi imagina que para un anciano no debe de existir mejor manera para dejar el mundo que acompañado en el lecho por una de esas bellezas desnudas e inconscientes, y duda con provocarse la muerte. De hecho, por intermedio de un amigo se entera de que no de los clientes ha muerto en una de las habitaciones.
Sin embargo, en el último capítulo, cuando está acostado por primera vez con dos bellas durmientes, la que parece adquirir una frialdad mortal es una de las muchachas, y Eguchi tiene que llamar a la cuidadora, que se limita a llevarse a la chica y sugerirle que siga durmiendo con la otra.
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