Resumo de Siddartha - Hermann Hesse

Por su espíritu rebelde y su búsqueda de respuestas para los grandes dilemas del espíritu humano, Hermann Hesse se convirtió en ídolo de la contra-cultura y del movimiento hippie en las décadas de 50, 60 y 70. En este libro él se detiene en el pensamiento de la India milenar, en un momento en que el misticismo oriental no había despertado aún el interés del occidente, y solo Schopenhauer, hasta entonces, se había dedicado al estudio de esta filosofía. En este romance, más que simplemente ocuparse de los preceptos del pensamiento oriental, Hesse cría un desvío de ese pensamiento, con la intención de avanzar aún más en la cuestión de la realización completa del yo y la búsqueda de la verdad de la perfección. Siddartha cuenta la historia de este hijo de la más alta casta de la India antigua que, como brahmán, fue criado en el estudio de las escrituras sagradas y en la práctica de sacrificios y meditaciones. Con todo, su corazón no estaba tranquilo y su alma no encontraba paz. Decidido a encontrar quien le pudiese dar las respuestas que su espíritu ansiaba, abandona la casa del padre para juntarse en la selva a un grupo de ascetas. Con el tiempo se convierte él mismo en un gran samana, dominando todas las técnicas de superación del ego, los ayunos, las mortificaciones y meditaciones, para llegar a la conclusión de que no será por la negación de sí mismo, de su cuerpo físico y de sus sentidos, que conseguirá vivenciar la verdadera ?desindividualización?. Parte entonces en busca de otro Siddartha, el Buda, aquél que alcanzó la iluminación, aquél que, conociendo el Nirvana, interrumpió el inexorable ciclo del eterno retorno. Pero el encuentro con el iluminado y su nueva doctrina, solo reforzará su convicción de que solamente por experiencia propia se puede llegar a la verdad, y no a través de maestros, doctrinas y enseñanzas, pues ?pensaba él?, siendo toda experiencia personal, no puede ser compartida con otro en toda su plenitud. Creía firmemente que sólo concentrándose en el completo conocimiento de sí mismo, conseguiría dominar y aniquilar el ego y, finalmente, conocer la verdad. Siddartha abandona la vida de devoto y dedica sus días al aprendizaje de todas las posibles sensaciones y pasiones, siendo iniciado por una bella cortesana en los placeres sensuales y materiales de la vida mundana. Pero al fin, sólo conocerá el cansancio, el abatimiento y el desespero. Constata, desalentado, que en la búsqueda que emprendió hasta allí, perdió la belleza y la frescura de su juventud, y la esperanza y fe en sí mismo. Decide entonces acabar con su propia vida, que considera malograda. El reencuentro con un hombre simple cambiará, no en tanto, el rumbo de su camino, y el antiguo brahmán pasa a vivir una existencia tranquila, de simplicidad e íntimo contacto con los elementos de la naturaleza, con los cuales nutre su espíritu, aumentando en sabiduría. Pero el mundo aún le reservará una última y lancinante experiencia de manifestación del ego y apego a las pasiones humanas, con el inesperado reencuentro de su hijo y el inexprimible sufrimiento de su pérdida. Después de toda una vida de obstinada búsqueda, será finalmente a través de la percepción de la unión del universo, que Siddartha alcanzará la comprensión del significado de la existencia, y la revelación final de la perfección.

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