El Principito
(Antoine de Saint Exupery)
HUMANISMO EN ?EL PRINCIPITO? La palabra HUMANISMO como concepto, referida a la corriente filosófica que caracterizó al Renacimiento, fue utilizada por los historiadores del siglo XIX, a fin de identificar a los intelectuales del siglo XIV que rescataron para entonces la ideología del período denominado Antigüedad Clásica con lo que, se dice, enriquecieron notablemente la cultura de su tiempo, logrando superar las condiciones de la Edad Media, etapa cronológica precedente. El término fue utilizado también ?para denominar toda doctrina que defienda como principio fundamental el respeto a la persona humana? (1), para hacer a esta, centro de la existencia, merecedora de toda consideración. Es la reciente definición la que me interesa en los comentarios que me propongo hacer acerca de El Principito, célebre relato del escritor francés Antoine de Saint Exupery (1900?1944). Observamos que Saint Exupery, ya desde la dedicatoria, revela una considerable carga humanística al dirigirse compasivamente a León Werth, un amigo que la estaba pasando mal a causa de la segunda guerra mundial. La obra, con lenguaje que ventila la piel infantil equipaje de todos, e ingenioso vuelo fabulatorio, relata el encuentro entre un aviador extraviado y un peculiar niño rodeado de un halo misterioso (El Principito), quien en pleno desierto de Sahara, se le aparece al piloto. La relación servirá para que éste emprenda, a nivel de la conciencia, un viaje hacia lo que para los adultos de Saint Exupery es un mundo enigmático: el mundo de la niñez. Mundo en el cual ?esos locos bajitos? ?como dice Serrat- pueden ver, detrás de varias escuetas líneas de creyón representando una caja cerrada, un cordero dormido; o en grafismo donde los grandes adivinan un sombrero, una serpiente boa comiéndose un elefante. Se configura una dialéctica de lo aparente y lo real. A la vista del adulto, lo real está determinado por lo aparente, en razón a disparatados juegos deductivos: A) Los científicos deben vestir a la usanza europea. B): El asteroide B612 fue descubierto por alguien con indumentaria turca. Conclusión: El asteroide B612 no existe. Estos enfoques, en función de evaluaciones justas, expresan la necesidad de ver más allá de lo que los ojos ven, lo que se compagina con los afanes de muchos filósofos a lo largo de la historia, pero haremos énfasis en los de la Antigüedad Clásica: Tales de Mileto, Anaximandro, Sócrates, Platón, Aristóteles, etc.; inspiradores del humanismo renacentista, quienes también se dedicaron con denuedo a la búsqueda de la verdad. Ellos, aun con cierta dosis de ingenuidad, dieron los primeros pasos para el desarrollo de un conocimiento en el plano de las ciencias; pero nosotros, especialmente los adultos, muchas veces no atestiguamos la realidad de lo corriente a través de un prisma claro, ciertas humaredas del alma nos empañan la mirada. Odio, frustración, vanidad, miedo, orgullo, desengaño; impiden al corazón desplegar su pureza lectora a fin de lograr los equilibrios necesarios para la objetividad. Desde el punto de vista del humanismo, El PRINCIPITO da realce a valores que constituyen factores importantes para lograr favorables relaciones interpersonales y también con el sistema ecológico, como es el caso de las que se establecen entre el niño y los elementos que conforman su pequeño planeta: sus volcanes, su flor, sus puestas de sol... También señala la inutilidad de ciertas posturas existenciales, dibujadas en personajes a los que el niño visita en su recorrido por el universo: un borracho, un vanidoso, un rey, entre otros; aunque, vale observar que de los principios con que se rige el rey, pueden extraerse frases revestidas de sensatez como la utilizada para servir de epígrafe a éste texto. (1) http://www.artehistoria.com/frames.htm?http: //www.artehistoria.com/historia/contextos/1849.htm
Resumos Relacionados
- El Aviador Qeu Supo Aterrizar En Nuestro Corazón, A 60 Años Del Nacimiento Del Principito
- El Principito
- El Principito
- El Principito
- El Principito
|
|