Resumo de Edgar Allan Poe - Narraciones extraordinarias

La Barrica del Amontillado. Es uno de los siete cuentos de este libro. Trata de un hombre que resuelve vengarse de otro, ya que lo ha ofendido reiteradas veces, siendo la que màs le ha dolido y no està dispuesto a perdonar el insulto.
El ofensor y futura vìctima se llama Fortunato y quien està dispuesto a vengarse Montresor.
Planea la citada venganza, tomando en cuenta el punto fuerte de su contricante, jactarse de ser un excelente catador de vinos.
Un dìa lo encuentra en una fiesta de Carnaval, Fortunato està disfrazado de Bufòn y Montresor le dice que tiene una botella de Amontillado y que tiene dudas sobre si es legìtimo. Ademàs que le pedirà que a otro amigo, de nombre Luschemi que sea el catador. Ante ello, Fortunato (que ha sido herido en su amor propio) se ofrece y se dirigen al palacio, que estaba desierto por la fiesta y por la habilidad de su dueño y comienzan el recorrido por salas y escaleras, con riesgo de resbalarse, acompañando el recorrido con una bebida embriagadora para Fortunato, mientras por màs de tres veces le pregunta si no quiere volver atràs, debido a su resfriado y que la cueva es hùmeda y con salitre. Fortunato se niega, por no privarse del amontillado.
En el camino, comentan sobre si uno y otro son mazones, no estando claro si se trata de la Hermandad o del oficio de albañil, que a la larga terminarà con la vida de Fortunato, Montresor aprovecha a guardar en sus ropas, una pala de mano.
Luego al final de la cueva està la trampa, lo ata con cadenas, de forma que Fortunato, no pueda soltarse. Al mismo tiempo comienza a construir filas de un muro. Nota que Fortunato està màs lùcido, ya que da un quejumbroco grito, pero continùa el muro hasta la cuarta columna. Al llegar a esta, oye ruidos furiosos de cadena, interrumpe el trabajo, pero luego continùa hasta la sèptima fila, luego a pesar de los gritos, continùa hasta la dècima fila, luego la undècima y la duodècima. Cuando le queda solamente una piedra, Fortunato reclama como si se tratara de broma, pide volver a su residencia, lo suplica. Pero no tendrà ninguna suerte, Montresor coloca la ùltima piedra, cierra el nicho y lo tapa con una muralla de huesos. Durante cincuenta años, no se volviò a abrir. Una de las premisas de la venganza era llevarla a cabo obviamente y mantener la impunidad. Lo logrò.

Resumos Relacionados