Resumo de La Medida Probable 4

de eso no es animador. Es necesario, por lo tanto, inyectar en el organismo un ingredientede poca audiencia en esa cultura amontonada de ruidos – la paz. Superhombres, en su concepción clásica, no sufren de neurastenia o depresión. Por otro lado, son criaturas siempre dispuestas a ayudar al próximo. Una actitud que, en la visión de los santos, se encierra en una única palabra – amor. No se trata, todavía, del amor que derrama en las canciones de un hombre por una mujer y viceversa. Tampoco del intenso y no raro torpe amor de un padre por u hijo y viceversa. O del amor por la naturaleza o a su animal doméstico. No. El amor que los santos y que los superhombres manifiestan viene acompañado de determinada calificación: Amor Divino. Él no fija atención en imperfecciones. Consecuentemente él no juzga. Él no espera nada, consecuentemente no se siente contrariado. Nunca se ha oído contar que cuando SuperHombre, al cargar al puerto seguro posibles víctimas de una desgracia inminente, él de pronto dice: ¿y tú, oye? ?También, con este estómago! ¿y qué son estos granos en tu cara? ¿y ese pelo lleno de caspa? El Amor Universal y/o Divino absorbe lo que hay de mejor en toda parte, y cuando la personalidad, o la actividad exterior del espíritu, reconoce su presencia y en él se mantiene sintonizada la realidad cambia como en una magia. Toda empresa es hecha sin trastornos, o los trastornos ocasionales son vistos como migajas e indignos de nota. Las actividades creadoras y emprendedoras tornanse contínuas y expansivas, las dos doradas por la autoconfianza y condimentadas con alegría. Pero ¿cómo generar ese sentimiento, con atención, y confortablemente, y ponerlo en el lugar de la irritación y del odio? Encuanto las religiones no se equiparan a la carencia de la inteligencia y la medicina practica la inexistencia del alma, poco queda sino reverenciar las ideas dominantes del tiempo presente: placer sin felicidad y ciencia sin sabiduría. Sabios de eras remotas decían que para escabullirse de eso es necesario una recontrucción del ser, algo solamente posible con el ejercício simutáneo de la voluntad, de la intición y del raciocínio. Sabios modernos añadieron: presta atención a los alimentos. En sentido figurativo, da lo mismo que alimentarse de “cheetos” en lugar de espinacas. Así como el físico, el cuerpo de las emociones necesita de alimento apropiado. Si la vitamina concedida al cuerpo mental, o emocional, es unicamente constituida de “Cidade Alerta”, además de gritos e insultos contínuos, rencor y autopiedad, será imposible una cosecha armoniosa. Sabios de otra orden, en el início de los años 70, crearon el siguiente refrán: “dejar su luz brillar y ser muy tranquilo”. Una cosa parece cierta, la presonalidad solo se estabiliza cuando empapada de princípios correctos. Nuestro guerrero durmió 16 horas ininterrumpidas y, al despertar, mostró hambre y silencio. Los médicos jugaron por tierra los temores de la madre al diagnosticar fatiga y recomendar reposo. Por la primera vez en muchos años el guerrero roga tregua y deja sus cordas vocales merced de un poder que no el suyo al tocaren delicadamente el deseo de permanecer quieto y a solas. La esposa angustiada, los hijos hesitantes y los socios inquietos obedecen contrariados su deseo. Antes de salir, la hija más vieja deja encima de la Programa de televisión brasileño que se dedica a noticiar crímenes violentos.

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